Antes de traértelo en la oración,
supongo que debo rezar
por aquellos menos afortunados que yo...
Aquellos que en este mundo difícilmente
tienen suficiente comida para este día,
y por aquellos que no tienen un techo
sobre sus cabezas esta noche...

También rezo por las familias
que han perdido a sus seres amados
en una muerte repentina,
por los padres cuyos hijos tienen leucemia,
por tantas personas que están muriendo
de tumores cerebrales,
por los cientos de miles
que hoy están inútiles a causa de
otros terribles cánceres,
por las personas cuyos cuerpos
han sido súbitamente hecho pedazos
en choques automovilísticos,
por aquellos que están muriendo
en los hospitales con quemaduras angustiosas
sobre sus cuerpos,
cuyos rostros han sido tan quemados
que es imposible reconocerlos...

Yo rezo por las personas con enfisema,
cuyos ojos se llenan de terror indescriptible
cuando luchan por cada aliento
simplemente para vivir,
por aquellos atormentados además de palabras
por miedos irracionales,
por los ancianos quienes están arruinados
con los dolores del envejecimiento
cuyo único "escape" es la muerte...

Rezo por las personas quienes están viendo
a sus seres amados marchitarse antes sus ojos
a través del dolor del Mal de Alheizmer,
por los miles que están sufriendo
la agonía del SIDA,
por aquellos que están tan desesperados
que están casi por cometer suicidio,
por las personas atormentadas
por los demonios del alcoholismo
y la adicción a las drogas...

Rezo por los niños que han sido abandonados por sus padres,
por aquellos que son abusados sexualmente,
por las esposas presas en una callada desesperación,
golpeadas por un marido ebrio y cruel,
por las personas cuyas mentes han sido destruidas
por desórdenes mentales,
por aquellos que lo han perdido todo en inundaciones,
huracanes y terremotos...

Rezo por los ciegos
quienes nunca han visto el rostro de aquellos que aman,
o la belleza de un amanecer,
por aquellos cuyos cuerpos están horriblemente deformados
por la dolorosa artritis,
por los muchos cuyas vidas les serán arrancadas
hoy por asesinatos,
por aquellos consumiéndose en sus camas de muerte...

Más que todo,
me lamento por los millones que no conocen
el perdón que se encuentra en Jesucristo...

Por aquellos quien en un momento del tiempo
serán arrastrados hacia el infierno
por la fría mano de la muerte
y descubran con horror absoluto
la venganza indescriptible del fuego eterno.
Ellos serán condenados eternamente al castigo perpetuo...

¡Oh, Dios, yo rezo por todos ellos!
Es extraño...

Parece que no puedo recordar
cuál era mi problema...

¡En el nombre de Jesús, Amén!